Elsa Palou: una servidora que levantó un hospital en ruinas
Luego del sisma político vivido en Honduras con el golpe de Estado en 2009, esta Nación centroamericana ha vivido la agudización de sus problemas sociales. Catalogado como uno de los países más violentos del mundo, y con instituciones públicas debilitadas por casos de corrupción, entre las que destaca el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS). Además, con hospitales en constante crisis de abastecimiento, insuficientes médicos y trabajadores en huelga por el incumplimiento de compromisos salariales, entre otros problemas.
En el Hospital Escuela Universitario (HEU), el centro hospitalario público más grande del país, se estima que diariamente ingresan unas 230 personas a la emergencia. Entre un 30 y 50 por ciento de las emergencias están asociadas a víctimas de violencia.
Pero no solo los pacientes han sufrido emergencias. Este hospital se había caracterizado por la carencia de insumos, los malos manejos administrativos, contratos producto de compadrazgos políticos y huelgas constantes. Todos factores que incidían en la imposibilidad para atender adecuadamente a la población.
Tras un acuerdo gubernativo, en 2012 el HEU trasladó su conducción a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y de inmediato se conformó una junta directiva encabezada por Elsa Palou –médico de reconocida trayectoria por su especialidad en infectología- acompañada de un equipo multidisciplinario.
«Encontramos un hospital con el 80% de los recursos ejecutados pero con un desabastecimiento de insumos del 90%. Sumado, una deuda por USD4.7 millones», cuenta la doctora Palou.
Las nuevas autoridades iniciaron un proceso de cambio del hospital enfocado a solventar los problemas críticos que enfrentaba el nosocomio, como la falta de alimentos y medicinas para los pacientes. Además de llevar a cabo estrictos controles financieros y mejor registro de la asistencia del personal, también se propusieron transparentar las compras y recepción de los medicamentos, que habían sido objeto de corrupción.
Para tal fin fue necesario poner en marcha actividades contundentes como eliminar la sobrevaloración en la compra de medicamentos, solventar los endeudamientos con proveedores, y separar a recomendados políticos que habían sido contratados, logrando de esta forma poner en orden las finanzas del HEU. La buena gestión de los escasos recursos, hizo posible la compra de nuevos equipos e insumos que les permitieran atender áreas en las cuales los pacientes no estaban recibiendo una atención adecuada.
Para 2014, el servicio en el Hospital reflejó notables mejoras, pues efectuaron más de 700 mil atenciones, y gracias a los progresos administrativos, se convirtieron en el hospital más abastecido del país. La transparencia en la gestión de la HEU ha sido otra de las acciones transformadoras, y objeto de reconocimiento. Las contrataciones de personal en todas las áreas, ahora pasan por concursos públicos y se rechazan a los recomendados políticos. Cuenta la doctora Palou que en ocasiones han llegado a tener hasta 28 procesos de licitación simultáneos, y para estas siempre son invitadas las veedurías.
Su empeño por la transparencia, llevó a la doctora Palou a recibir en 2015 un reconocimiento del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA). Esta entidad fue instituida por el Congreso Nacional para entregar distinciones a hondureños de distintos ámbitos de la vida nacional que son ejemplos de transparencia en el desempeño de sus funciones.
En la actualidad, el Hospital Escuela Universitario brinda anualmente 640 mil citas regulares y atiende aproximadamente 345 mil emergencias. No se ha vuelto a tener huelgas, dado que cumplen puntualmente los compromisos salariales. El presupuesto se ejecuta en 99.98% con una correcta distribución a lo largo del año. Las evaluaciones demuestran que siempre se cuenta con un abastecimiento de insumos y medicamentos de cerca del 85%. En tiempos de la crisis del seguro social ―tras el escándalo de corrupción— el HEU auxilió a los pacientes que llegaban referidos del IHSS. Por si fuera poco, se reconoce que el área de atención de embarazos es la más moderna del país, superando a los hospitales privados.
La doctora Palou es un ejemplo de un servicio público ejemplar. Ella, con sus acciones cotidianas, dignifica el valor de las instituciones públicas al poner su máximo empeño al servicio de la sociedad hondureña, y manifiesta que «no se puede quedar bien con todo el mundo, pero mientras el trabajo se haga de forma correcta y apegada a ley, se puede demostrar que lo público funciona, y que se puede administrar una institución de forma transparente». Por esta razón, a la doctora Palou la reconocemos como parte de nuestros #ServidoresConValor.
Crédito de la fotografía: Captura de pantalla de CNA